Autora: Ana Muñoz


La dispareunia consiste en dolor durante o después del acto sexual. Aunque este problema puede afectar también a hombres, es más frecuente en mujeres. Las mujeres con dispareunia pueden sentir dolor en la vagina, el clítoris o la vulva.

Las causas de la dispareunia son diversas. Entre las comunes se incluyen las siguientes:

- Sequedad vaginal por falta de lubricación natural.

- Vaginitis atrófica. Es una inflamación de la vagina producida por el adelgazamiento y encogimiento de los tejidos vaginales, además de la disminución en la lubricación de las paredes vaginales y es causada por la falta de estrógeno, algo que normalmente sucede después de la menopausia.

- Efectos secundarios de fármacos como antihistamínicos y tamoxifen (Nolvadex y otras marcas).

- Una reacción alérgica a la ropa, espermicidas o duchas vaginales.

- Endometriosis, una afección a menudo dolorosa en la cual el tejido de la pared uterina emigra y crece anormalmente dentro de la pelvis.

- Vestibulitis vulvar. Inflamación del área que rodea la abertura vaginal.

- Enfermedades de la piel, como el liquen plano y el liquen escleroso, que afecten la zona vaginal.

- Infecciones del aparato urinario, infecciones vaginales por hongos o enfermedades de transmisión sexual.

- Trauma psicológico, a menudo debido a una historia de abuso sexual o trauma en la infancia.

Síntomas

Las mujeres con dispareunia pueden sentir un dolor superficial en la entrada de la vagina, o un dolor más profundo durante la penetración o el empuje del pene. Algunas mujeres también pueden experimentar una contracción intensa de los músculos vaginales durante la penetración, que recibe el nombre de vaginismo e imposibilita la entrada del pene o produce dolor.

Diagnóstico

La dispareunia se diagnostica principalmente en base a los síntomas. Tu historia médica y sexual y el examen físico ayudarán a tu médico a determinar la causa del problema. Una pista importante es la distinción entre el dolor que ocurre al tocar los órganos genitales o al iniciar la penetración, y el dolor que ocurre con una penetración más profunda. Por tanto, el médico te hará preguntas acerca de la localización, la duración y el momento en que ocurre el dolor. También te preguntará lo siguiente:

  • Si ha habido una época en la que no presentabas dolor, o si has tenido siempre dispareunia.
    Si tienes suficiente lubricación natural, y si tus síntomas mejoran si utilizas lubricantes comerciales.
  • Acerca de tu historia sexual, para poder determinar tu riesgo de enfermedades de transmisión sexual.
  • Si has sido víctima de abuso sexual, o has tenido alguna lesión traumática de tus órganos genitales.
  • Si eres una mujer de mediana edad, tu médico te preguntará si tienes períodos menstruales irregulares, accesos de calor, o sequedad vaginal, síntomas que pueden sugerir una vaginitis atrófica.
  • Si eres una madre primeriza, tu médico te preguntará si estás amamantando a tu hijo/a, dado que esto puede producir sequedad vaginal y, por tanto, dispareunia.

Durante el examen físico, el médico comprobará tu pared vaginal para saber si hay muestras de sequedad, inflamación, infección (especialmente por hongos o herpes), verrugas genitales o cicatrices. También hará un examen pélvico interno para buscar tumores, sensibilidad al tacto o signos de endometriosis. Tu médico también puede sugerirte que hables con un psicólogo para determinar si una historia de abuso sexual, trauma o ansiedad puede estar contribuyendo a la aparición de los síntomas.

Duración de lo síntomas

La duración de los síntomas dependen de la causa. Si se trata de sequedad vaginal por una lubricación inadecuada, los síntomas mejorarán rápidamente al utiliza un lubricante comercial o si esperas a estar más excitada antes de la penetración. Si tienes sequedad vaginal debida a una vaginitis atrófica, tus síntomas mejorarán con una crema de estrógenos colocada en la vagina. La terapia oral con estrógenos puede aumentar el riesgo de cáncer de mama y de enfermedad cardiaca, pero las fórmulas vaginales se consideran seguras para la mayoría de las mujeres.

Si tienes una infección urinaria o una infección vaginal por hongos, la dispareunia suele desaparecer tras una semana con un tratamiento con antibióticos o antifúngico. Si tienes una enfermedad de transmisión sexual, puedes necesitar un tratamiento más largo e intensivo con antibióticos.

Las enfermedades de la piel, a menudo requieren tratamientos más largos. Si has tenido síntomas de dispareunia durante meses o años, y los factores psicológicos desempeñan un papel, puedes necesitar una psicoterapia.

Prevención

Para disminuir el riesgo de infección por hongos evita la ropa apretada, usa ropa interior de algodón y utiliza una higiene adecuada. Cambia tu ropa interior después de sudar mucho. Báñate o dúchate a diario, y ponte ropa seca rápidamente después de nadar.

Para evitar infecciones de la vejiga, límpiate de delante hacia atrás después de usar el váter, y orina siempre después del acto sexual con penetración.

Para evitar enfermedades de transmisión sexual, practica el sexo seguro manteniendo una relación con una sola persona, o usando preservativos para protegerte contra enfermedades de transmisión sexual.

Para prevenir la sequedad vaginal, utiliza un lubricante, o busca un tratamiento si la sequedad es debida a una vaginitis atrófica.

Si tienes endometriosis, evita la penetración muy profunda, o realiza el acto sexual una o dos semanas después de la menstruación (antes de la ovulación), cuando la enfermedad tiende a ser menos dolorosa.

Tratamiento

El tratamiento depende de la causa de la dispareunia:

Si el problema es la sequedad vaginal, puedes facilitar la penetración mediante la estimulación del clítoris antes del acto sexual o mediante el uso de lubricantes.

Para las infecciones vaginales por hongos, tu médico te proporcionará un medicamento antifúngico.

Los antibióticos se utilizan para las infecciones del tracto urinario o las enfermedades de transmisión sexual.

Para aliviar la inflamación dolorosa, utiliza baños de asiento, que son baños de agua templada de la zona genital.

Para las enfermedades de la piel que afectan al área vaginal, el tratamiento variará dependiendo de la enfermedad.

Para la vestibulitis vulvar, el tratamiento suele consistir en pomada de estrógenos de uso tópico, y terapia mediante biofeedback para reducir la tensión muscular en la base de la pelvis.

Para la vaginitis atrófica, se utiliza la terapia con estrógenos, en forma de pomada vaginal o en píldoras.

Si la endometriosis está causando la dispareunia, puede utilizarse medicación o puedes necesitar una intervención quirúrgica para controlar o eliminar los crecimientos anormales de tejido uterino.

Para la dispareunia que no tiene ninguna causa física evidente o ha tenido una duración de meses o años se recomienda un asesoramiento psicológico para tratar el estrés o ansiedad con respecto al acto sexual.