Autora: Ana Muñoz


Las cataratas consisten en una pérdida de transparencia del cristalino, que es una lente transparente situada detrás de la pupila que sirve para enfocar los objetos con claridad.

Debido a que muchas personas tienden a pensar que es normal perder algo de visión al envejecer, muchos casos de cataratas no se detectan hasta estar en una fase muy avanzada. Sin embargo, cuando las cataratas se detectan en las fases iniciales puede detenerse el proceso o incluso curarse.

Aunque al principio la persona afectada pueda no notar ningún problema de visión, con el paso de los años, el cristalino se va volviendo cada vez más opaco. Empieza a resultar más difícil percibir detalles y los colores parecen diferentes. Si la persona afectada es miope, las cataratas pueden mejorar su visión durante un corto periodo de tiempo. En el peor de los casos, las cataratas pueden dejar ciega a una persona.

La mayoría de los casos son cataratas seniles, que suelen aparecer con la edad, pero esto no significa que sean una parte normal del envejecimiento. Las cataratas están causadas por la destrucción provocada por los radicales libres. Aunque es cierto que los radicales libres pueden aumentar con la edad, la mayoría se deben al estilo de vida. La alimentación inapropiada, la exposición excesiva a sol, y el tabaco son las causas principales.

Los problemas digestivos pueden contribuir a la aparición de cataratas, debido a que los nutrientes que no se absorben bien pueden producir radicales libres. Un nivel elevado de glucosa en sangre, como sucede en la diabetes, es uno de los principales factores de riesgo para el desarrollo de cataratas.

Alimentación

  • Toma frutas y verduras de colores intensos, pues son la mejor fuente de antioxidantes. De ellos, los carotenoides son los más importantes para los problemas oculares. Se encuentran en las verduras de hoja de color verde oscuro, pimientos, tomates, zanahorias, naranjas, uvas rojas, mangos y melones. Toma espinacas y col rizada, pues contienen unos tipos de carotenoides (luteína y zeaxantina) que disminuyen el riesgo de tener cataratas. Las yemas de huevo son también ricas en carotenoides.
  • La vitamina C y los bioflavonoides trabajan juntos para reducir el daño causado por los radicales libres. Además mejoran los tejidos y los capilares de los ojos. Se encuentran en los frutos del bosque (moras, fresas, arándanos, cerezas, etc.), tomates y ciruelas. La vitamina C se encuentra en los cítricos.
  • Evita los alimentos fritos y los que contienen grasas saturadas, hidrogenadas y parcialmente hidrogenadas. Evita también los alimentos procesados y refinados, incluyendo el harina blanca (toma pasta integral, pan integral, arroz integral). Estos alimentos contienen gran cantidad de radicales libres.
  • El alcohol sobrecarga el hígado y merma su capacidad para desintoxicar tu organismo; por tanto, evítalo.
  • Algunos autores hablan de la existencia de una asociación entre las cataratas y la incapacidad para digerir bien la lactosa (el azúcar de la leche). Aunque esto no se ha demostrado, puede ser buena idea que las personas con cataratas eliminen los productos lácteos de su dieta.

Hierbas y suplementos

  • Vitamina C. Es uno de los principales antioxidantes que protegen el cristalino. Toma 1000 mg dos o tres veces al día.
  • Vitamina E. Es un antioxidante que protege del daño de los radicales libres. Toma 400 Ui de un complejo que contenga vitamina E con tocotrienoles y tocoferoles.
  • Vitaminas del grupo B. Las vitaminas B2 y B3 protegen contra las cataratas. Toma 50 mg de un complejo del grupo B diariamente.
  • Raíz de genciana y betaína HCL. Mejora la acidez estomacal y la función digestiva. Toma 250 mg con las comidas. La betaína HCL aumenta los niveles de ácido estomacal y mejora la absorción de nutrientes. Toma una o dos cápsulas con las comidas.
  • Arándano (Vaccinium myrtillus). Protege el cristalino de los radicales libres. Toma 160 mg dos o tres veces al día de un extracto con un 25% de antocianósidos.
  • Complejo de diversos carotenoides. Contienen diversos carotenoides que protegen la vista, como luteína, zeaxantina, o beta caroteno.
  • Complejo multivitamínico. Proporciona los nutrientes necesarios para neutralizar los radicales libres.