Este test consta de 10 preguntas.

Cuando estoy estresado, no encuentro satisfacción en las cosas que hago.

Si estoy bajo presión, cambio mis hábitos, Por ejemplo, duermo más o menos horas de lo habitual, como en exceso o como poco, bebo o fumo más, etc.

Cuando estoy preocupado, duermo mal y tengo sueños desagradables.

Si tengo que tomar una decisión con rapidez, no me decido hasta que es demasiado tarde.

Suelo ser pesimista respecto a cosas que al final salen bien.

Cuando tengo mucha presión, padezco síntomas físicos como dolor de cabeza, dolor de estomago, fatiga o dolor de espalda.

Mi ira o irritación es desproporcionada teniendo en cuenta el suceso que la ha desencadenado, como atascos de tráfico, servicio lento en un restaurante, que el ordenador no responda correctamente, etc.

Necesito una bebida o un tranquilizante antes de afrontar una situación difícil.

Cuando algo me está molestando, soy reacio a conocer nuevas personas o ir a encuentros sociales.

Si estoy preocupado, no puedo concentrarme cuando leo.