Autora: Ana Muñoz
La hepatitis C consiste en una inflamación del hígado causada por un virus que se transmite mediante el contacto con sangre infectada. Por lo general, las personas infectadas no muestran síntomas hasta que el virus daña el hígado. Sin embargo, incluso aunque el hígado no esté dañado, algunas personas pueden sentir cansancio y/o pérdida de apetito.
Tratamiento
Las siguientes plantas o suplementos pueden servirte de ayuda para combatir esta enfermedad:
Cardo mariano
Es la planta más utilizada en este enfermedad. No ejerce un efecto directo sobre el virus, pero ayuda a reparar el hígado dañado y lo protege contra daños posteriores. Promueve el crecimiento de células hepáticas, reduce la oxidación y reduce la inflamación. Tiene también un efecto antihepatotóxico; es decir, impide que diversos tipos de toxinas dañen el hígado.
Raíz de regaliz
Contiene un extracto, la glicirrina, que tiene un efecto beneficioso en esta enfermedad. Tiene propiedades antivirales y antiinflamatorias. También puede ayudar a impedir el desarrollo de cáncer de hígado. No debe tomarse en cantidades elevadas, pues puede aumentar la presión sanguínea, producir retención de líquido y desequilibrio electrolítico.
Gingseng
Puede mejorar el funcionamiento del hígado y reducir el daño hepático.
Tratar los efectos secundarios del interferón
Si estás en tratamiento con interferón, las siguientes plantas pueden ayudarte con los efectos secundarios:
Jengibre
Ayuda a reducir las náuseas y vómitos
Hipérico
Se usa para combatir la depresión causada por el tratamiento con interferón.