Autora: Ana Muñoz


¿Qué es la preeclampsia?

Consiste en un repentino aumento de la presión sanguínea en mujeres embarazadas después de la semana 20 de embarazo. También se produce un alto nivel de proteínas en la orina.

La preeclampsia puede dañar los riñones, el hígado, el cerebro y producir problemas de salud crónicos. Puede ser fatal tanto para la madre como para el hijo. Suele afectar más a las mujeres en su primer embarazo, mujeres obesas, embarazos múltiples, mujeres menores de 18 años y mayores de 40 y mujeres con historia de diabetes, hipertensión o enfermedad renal.

Signos de preeclampsia

A menudo, las mujeres con esta enfermedad no se sienten enfermas, aunque pueden experimentar los siguientes síntomas:

  • Una ganancia de paso mayor que la esperada en un embarazo normal o un repentino aumento de peso en uno o dos días.
  • Dolor abdominal en el lado derecho, bajos las costillas.
  • Dolor de cabeza pulsante y persistente.
  • Dolor en el hombro derecho.
  • Hinchazón de las manos, pies, cara y/u ojos.
  • Agitación.
  • Náuseas y vómitos.
  • Visión borrosa, sensibilidad a la luz o pérdida de visión temporal.
  • Disminución de la emisión de orina.
  • Si experimentas estos síntomas, busca atención médica de inmediato.

Causas

Aunque no se conoce con exactitud, entre las posibles causas se encuentran las siguientes: enfermedades autoinmunes, problemas en los vasos sanguíneos, dieta pobre y herencia.

¿Qué puedes hacer para prevenir la preeclampsia?

1. Reducir el estrés. El estrés juega un papel en el desarrollo de esta enfermedad, pudiendo aumentar el riesgo de padecerla.

2. Antioxidantes. Las mujeres con mayor consumo de beta-caroteno, alfa-caroteno, luteína y zeaxantina tienen un menor riesgo de padecer preeclampsia, comparadas con mujeres con bajos niveles de antioxidantes. Si vas a tomar antioxidantes, consulta primero a tu médico.