Los antipsicóticos suelen actuar tranquilizando sin alterar la conciencia ni producir excitación. En el tratamiento de la esquizofrenia, los antipsicóticos alivian los síntomas floridos como los trastornos del pensamiento, alucinaciones y delirios e impiden las recaídas. Su eficacia es más baja en personas apáticas y abstraídas. Funcionan mejor en pacientes con esquizofrenia aguda que en los casos de esquizofrenia crónica.
Si el tratamiento se suspende de forma inapropiada puede producirse una fuerte recaída. También puede producirse un síndrome de abstinencia, por lo que deberán retirarse de forma gradual.
Efectos adversos
Síntomas extrapiramidales: síntomas parkinsonianos, incluido el temblor, movimientos anómalos de cara y cuerpo (distonía); agitación (acatisia) que suele ocurrir tras administrar grandes dosis; discinesia tardía (movimientos rítmicos e involuntarios de la cara, la lengua y los maxilares) que suele aparecer tras un tratamiento prolongado y dosis altas pero también puede ocurrir en un tratamiento de corta duración y dosis bajas. Lo síntomas parkinsonianos suelen desaparecer al retirar el tratamiento, pero la discinesia tardía no siempre desaparece y el tratamiento no suele tener efecto.
Síntomas antimuscarínicos: sequedad de boca, estreñimiento, dificultad miccional y visión borrosa; muy raramente puede producirse glaucoma de ángulo estrecho.
Otros síntomas: somnolencia; apatía; agitación, excitación e insomnio; cefalea; confusión; trastornos digestivos; congestión nasal; síntomas cardiovasculares (como hipotensión, taquicardia y arritmias); alteraciones del ECG (se han notificado casos de muerte súbita); efectos endocrinos del tipo de trastornos menstruales, galactorrea, ginecomastia, impotencia y aumento de peso; agranulocitosis y leucocitopenia, fotosensibilización, sensibilización al contacto y erupción e ictericia; opacidades corneales y del cristalino y pigmentación purpúrea de la piel, córnea, conjuntiva y retina.
También puede producirse un síndrome maligno por neurolépticos, con hipertermia, nivel fluctuante de conciencia, rigidez muscular y disfunción vegetativa con palidez, taquicardia, labilidad de la presión arterial, sudoración e incontinencia urinaria. Es raro pero puede ser mortal.
Clasificación de los antipsicóticos
Grupo 1: clorpromazina, levomepromazina (metotrimeprazina) y promazina. Tienen efectos sedantes acusados y efectos adversos antimuscarínicos y extrapiramidales moderados.
Grupo 2: periciazina y pipotiazina. Tienen efectos sedantes moderados, efectos antimuscarínicos intensos pero menos reacciones extrapiramidales que los pertenecientes a los grupos 1 y 3.
Grupo 3: flufenazina, perfenazina, proclorperazina y trifluoroperazina. Tienen menos efectos sedantes, menos efectos antimuscarínicos y más reacciones secundarias extrapiramidales pronunciadas que los grupos 1 y 2.