Autora: Ana Muñoz
Las siguientes indicaciones pueden servirte de ayuda para planear una semana que haga que te sientas bien por dentro y por fuera y que te sirva para manejar el estrés del día a día. Además, si estás en tratamiento para algún problema de tipo psicológico, estas directrices pueden ayudarte a manejar tu problema o trastorno y apoyar tu tratamiento y recuperación. Puedes utilizarlas como guía para elaborar tu propio plan semanal.
Lunes. Elabora un plan
Decide qué tareas necesitas terminar durante la semana y elabora un plan sobre el modo y el horario para hacerlas. Si estás sobrecargado de trabajo, decide qué puede esperar una semana o dos. Si no tienes un horario muy apretado, planea algunas actividades que has estado esperando poder hacer.
Martes. Rodéate de personas que te apoyen
Haz planes con miembros de tu familia o amigos, o busca actividades en las que puedas conocer nuevas personas, como un curso, un grupo de ayuda, un deporte... Vuelve a quedar con alguien con quien habías perdido el contacto y recuerda viejos tiempos.
Miércoles. Cuida tu cuerpo
Cuidar tu cuerpo puede mejorar también tu salud mental. El miércoles puede ser el día de dedicar un cuidado especial a tu cuerpo y de comprobar si estás llevando un estilo de vida sano y tomar las medidas necesarias si no es así. Asegúrate de que estás tomando comidas nutritivas, evita el tabaco, utiliza las bebidas alcohólicas con moderación, bebe mucha agua, duerme lo suficiente y haz ejercicio regularmente.
Jueves. El día del altruismo
Ofrécete para algún trabajo voluntario para ayudar a otras personas. Te sentirás bien al hacer algo tangible para ayudar a otras personas que lo necesitan y te servirá para alejarte de tus propios problemas y verlos con más objetividad. También es un buen modo de conocer gente nueva que comparte tus intereses.
Viernes. Amplía tus horizontes
Crea un cambio de ritmo o amplía tus intereses. Explora un nuevo hobby, llena tu casa de plantas, planea un rato de senderismo o un viaje, busca lugares nuevos en tu ciudad, toma clases de baile, aprende a tocar un instrumento o hablar otra lengua...
Sábado. Valórate a ti mismo/a
Este puede ser el día para recordarte que has de tratarte con respeto y amabilidad, ser condescendiente contigo, perdonar tus errores, aceptar tus defectos (aunque proponiéndote mejorar) y evitar la autocrítica y autocastigo. Examina las cualidades que tienes y que te gustan, tus logros y tus capacidades. Repasa tus sueños y tus metas, analiza si vas por buen camino para alcanzarlas, las medidas a tomar, etc. Lee libros o artículos que te sirvan de ayuda en tu crecimiento personal.
Domingo. Relájate
Intenta meditar, dar un paseo por la naturaleza o hacer cualquier otra actividad que te resulte relajante y entretenida. La reflexión tranquila, en solitario o en compañía de otras personas, puede mejorar tu estado mental, fortalecer tu identidad personal y social, y alejarte del horario agitado del resto de la semana para cargarte de energía para la semana que empieza.
Dedica también un rato cada día a relajarte y reflexionar.