Autora: Ana Muñoz


1. Alimentación

El estreñimiento empeora el dolor de espalda. Por tanto, toma suficiente fibra, preferiblemente en forma de vegetales. La deshidratación también agrava el dolor; por tanto, asegúrate de beber agua. Si tienes un episodio de dolor, bébete unos vasos de agua en cuanto en dolor comience. Procura que tus huesos estén bien nutridos: toma proteínas de calidad (procedentes del pescado, soja y judías). Para obtener calcio, toma verduras de hoja verde, vegetales marinos, frutos secos, semillas, y tofu. Toma también alimentos ricos en ácidos grasos esenciales (salmón, caballa, almendras, nueces y semillas de lino).

Evita la cafeína y el alcohol, pues agravan la inflamación. Evita también los productos con alto contenido en azúcar y grasas saturadas, sobre todo si tienes sobrepeso.

2. Plantas y suplementos

Metilsulfonilmetano. Toma de 3000 a 8000 mg diarios divididos en varias dosis. Alivia el dolor y tiene un efecto antiinflamatorio. Reduce la dosis si te produce diarrea.

Calcio y magnesio. Toma dos veces al día un complejo que contenga 500 mg de calcio y 250 mg de magnesio. Alivian los espasmos musculares.

Bromelina. Toma 500 mg tres veces al día, entre comidas. Tiene un efecto antiinflamatorio natural.

Sauce blanco (salix alba). Toma un producto que contenga 240 mg de salicina o 5 ml de tintura tres veces al día. Sirve para reducir el dolor.

Sulfato de glucosamina. Toma 1500 mg al día. Se usa en casos de dolor de espalda por osteoartritis.

Crema de pimienta de Cayena (Capsicum annuum). Aplica la crema en la zona afecta entre 2 y 4 veces al día. Ayuda a aliviar el dolor.

Vitamina C. Toma 1000 mg tres veces al día. Reduce la inflamación y fortalece el tejido conectivo.

Vitaminas B1, B6 y B12. Toma 50 mg de B1 y B6 y 400 mcg de B12 tres veces al día.

3. Hidroterapia

Para aliviar los espasmos y la tensión sumérgete en un baño caliente. Para aumentar el efecto añade algunos de los aceites esenciales recomendados en el apartado de aromaterapia.

4. Reflexología

Trabaja las zonas correspondientes a la columna vertebral, las caderas y coxis.

5. Homeopatía

Para un dolor agudo, toma una potencia 30 CH, dos gránulos cuatro veces al día. Para un dolor crónico, tómalos dos veces al día durante dos semanas. Cuando notes mejoría, deja de tomarlos a no ser que regresen los síntomas.

Aesculus

Dolor en la parte baja de la espalda o en el sacro que empeora cuando estás sentado. Con frecuencia el dolor se extiende a la cadera derecha.

Bryonia

Rigidez y dolor en la parte baja de la espalda que empeora con cualquier movimiento y con el tiempo frío y seco, y mejora al frotar la zona afectada.

Calcarea carbonica

Dolor crónico de la parte baja de la espalda, con debilidad, en personas con sobrepeso que suelen tener frío. Los síntomas empeoran con el frío y la humedad.

Cimicifuga racemosa

Dolor y rigidez en el cuello y la espalda. Los músculos están doloridos, pero mejoran con el calor.

Ignatia

Dolor y calambres en la espalda como resultado de estrés emocional.

Magnesia phosphorica

Espasmos musculares en la espalda que mejoran con el calor.

Rhus toxicodendron

Rigidez en la parte baja de la espalda que empeora con el frío y la humedad y mejora con el movimiento.

6. Acupresión

Algunos de los siguientes puntos pueden ser dolorosos. Usa una presión ligera y continuada. Si el dolor es muy intenso consulta a un médico antes de trabajar estos puntos.

  • Puntos 25, 31 y 40 de vejiga para el dolor de la parte baja de la espalda.
  • Punto 20 de vejiga para el dolor en la parte media.
  • Punto 20 de vesícula biliar y 14 de vaso gobernador para el dolor de la parte alta.
  • Para el dolor de espalada causado o acompañado de tensión: 48 de vejiga.
  • Si además de dolor de espalda tienes artritis: 54 de vejiga.

7. Aromaterapia

Añade alguno de los siguientes aceites esenciales a un aceite para masaje: jengibre, pimienta negra o menta.

Para relajarte, utiliza jazmín, lavanda o geranio en un baño caliente. Si padeces de estrés o tensión continuado utiliza un difusor para liberar la esencia por la habitación.

Si sueles respirar de forma superficial en una crisis, utiliza aceite esencial de franquincienso, haciendo inhalaciones.